El Infierno es estar pendiente de un Otro.
(Dante: ¿te creíste el chiste de Francesca y Paolo?)
El Infierno es estar pendiente de un Otro.
(Dante: ¿te creíste el chiste de Francesca y Paolo?)
Una manera cuántica de entender los celos
sería saber que así como una partícula puede
estar en dos lugares a la vez y manifestarse,
nuestros cuerpos
pueden calcar ese comportamiento disociado
y estar aquí y allá
alegres o tristes.
(huelo a Spinoza).
El maestro Einstein
estudió muchos años lo que él denominó: teoría del campo unificado.
Teoría que daría sustento tanto a las leyes del universo como al mundo de las partículas elementales.
Una teoría lingüística unificada sería una buena solución para los celos o para otras
cuestiones del corazón: encontrar las concordancias entre las palabras y los comportamientos.
Sabemos contar hasta diez,
eso nos enseñaron en la escuela
pero en realidad
nos perdemos en el uno.
Las matemáticas desconocen los humores del corazón.
Él late desde el uno hasta tu muerte.
La muerte y las matemáticas se hermanan en la incertidumbre,
el corazón del cosmos elige
bombear la sangre de la vida
hacia todos los rincones del universo
y ahí
estás vos
acariciando a tu gato.